Todos tenemos muchas buenas ideas para aportar, lo que nos falla a casi todos es el impulso. Sea por inseguridades o comodidad, nuestra actividad socio-política se ha ido quedando en forma de comentarios desde sofás y smartphones. Es necesario un cambio individual de compromiso más allá de la opinión.
Si tienes una idea, realízala tú mism@
¿Te suenan las frases que empiezan por “alguien debería…” «Hay que hacer…»? Pasar de la idea a la acción es un punto crucial, las ideas por si solas son simplemente ideas. Pero cuando actuamos toman fuerza y se convierten en proyectos. Deja de esperar a que otros comiencen eso que tanto estás deseando.
Empodérate, eres capaz de comenzar una nueva aventura. Cómo se suele escuchar en algunas asambleas, “quien lo dice lo hace”.
Pide ayuda en lo que necesite el proyecto y que no puedas aportar tú
Habla con amigos y desconocidos que vayas encontrando por el camino. Cuéntales tu proyecto con ilusión, y deja que se lo piensen. Es posible que se convenzan con el tiempo. Cada cual tiene su ritmo. Los que compartan tu entusiasmo te aportarán apoyo y energía, y los que tengan otra visión te aportarán nuevas formas de mirar tu idea, y hasta puede que se convierta en otra mucho mejor.
«Si quieres llegar deprisa, ve solo; si quieres llegar lejos ve acompañado»
No esperes que el resto tenga tu misma visión sobre un mismo proyecto
Es común el malentendido entre compañer@s en el que se piensa que todos están yendo hacia una misma meta. Es probable que tengáis visiones muy parecidas, casi exactas, pero nunca la misma.
Lo mejor en estos casos es comunicarse continuamente, respetar la opinión de los demás, y no sentir que alguien está en contra tuya porque no piensa igual que tú.
Si no es divertido no es sostenible
Recuerda en todo momento, qué te está aportando en tu vida estar en un proyecto. En el momento en el que, por cualquier razón, no te compense dedicar tu energía, déjalo. No dejes que algo altruista se convierta en un compromiso tortuoso.
Sé el cambio que quieres ver en el mundo
La Cooperativa Integral d’Eivissa presenta un marco legal, incubador de ideas y proyectos, que sirve como punto de reunión de personas con inquietudes, emprendedoras y comprometidas con la sociedad y el medio ambiente, siempre desde un ambiente cooperativo, que sienten la necesidad de un cambio en el paradigma socio-económico vivido hasta el momento. Pasar a la acción es el siguiente paso tras el inconformismo.